Te preocupas por revisar tu estrategia de marketing todos los años? ¿No? Deberías hacerlo. Esto es esencial para que las metas de tu empresa se hagan realidad. Piensa en tu plan como el mapa que guía tu campaña, objetivos y equipo. Sin uno, las cosas podrían llegar a complicarse y no habría forma de enfrentar los imprevistos que surgen durante el año. Ten en cuenta que tu plan de marketing puede variar según la industria en la que te encuentres. Para facilitarte las cosas, aquí te dejamos una lista de lo que deberías incluir.
Resumen del negocio:
Sí, es exactamente lo que piensas: un resumen de tu empresa. El nombre, su ubicación, la misión, la visión, etc., deben incluirse aquí. Revisa que todo sea claro y consistente. También deberías incluir un SWOT (FODA en español) que indique las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas de tu negocio.
Iniciativas empresariales:
Este elemento de tu plan de marketing te ayudará a dividir las metas planteadas. Es mejor si puedes segmentarlas según los departamentos de tu empresa. Ten cuidado de incluir iniciativas muy generales. Mejor concéntrate en describir los diferentes proyectos específicos de marketing con sus objetivos y las formas de evaluarlos. Recuerda que para saber si algo funciona, necesitas establecer criterios para medir su impacto.
Mercado o público objetivo:
En esta sección, deberás investigar tu mercado. Si ya lo tienes, esto será muy sencillo. Aquí describe tu producto o servicio, tu competencia y, por último, tu buyer persona. Esta es una descripción semi-ficticia de tu cliente ideal, que se centra en rasgos como la edad, la ubicación, el trabajo y los desafíos personales.
Estrategia de marketing:
Utiliza la información anterior para determinar cómo deberías acercarte al mercado. ¿Qué te hace distinto a la competencia? Puede ser que alguien más ofrezca lo mismo que tú. Entonces, ¿por qué tu buyer persona debería escogerte? Este elemento suele incluir lo que en inglés llaman las 7 P del marketing: producto, precio, lugar, promoción, personas, proceso y evidencia física.
Presupuesto:
Ten cuidado de confundir esto con el precio de tu producto o con otras secciones financieras. No olvides que hablamos exclusivamente de marketing. Así que especifica la cantidad de dinero que la empresa ha asignado a tu equipo para perseguir las iniciativas y los objetivos descritos en los elementos anteriores. Piensa en qué lo gastarás: agencias, software, promociones pagadas o eventos.
Canales:
¿Dónde publicarás el contenido para atraer nuevas personas? Puede ser que ya cuentes con algún espacio publicitario, pero no te limites. Planea qué otras plataformas puedes usar, cómo las usarás y cómo medirás si están funcionando. Demuestra que tu negocio puede crecer con estas herramientas. Si tu empresa tiene una gran presencia en redes sociales, será mejor que realices una estrategia especifica por separado.
Estos elementos te ayudarán a construir tu plan de marketing inicial. No lo dejes para después, ¡comienza ahora! Si quieres impactar en este mundo competitivo, tú debes tener la iniciativa. Si aún no tienes un plan de marketing, ¿qué esperas? Con esto ya puedes empezar.
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